La vida transcurre como si nada hubiera pasado. El hinchzón persiste, pero está bajando a pasado agigantados. Las noches son odiosas porque, ¿quien no se hincha por la noche?. El paso que doy durante el día deshinchandome, jaja, lo retrocedo por la noche, pero bueno, parece que ahora se va poniendo amarilla la cosa, y los demás colores (fases de un moratón), van remitiendo.
Me acordaba hoy de mi hermana, mi querida hermana, que goza a diario de las playas en Cagliari donde, en otras anteriores ocasiones, he mencionado que se encuentra realizado Erasmus. Y he chequeado el Mail, y me he encontrado con unos fotomontajes de cuando fuí yo, hace ya un mes. Recuerdo que Martín, un amigo erasmus, de aquellas zonas, hacía fotos sin pensar para luego estos maravillosos paisajes retratar...
¡¡Martín, son increibles!!
A pesar de que hace ya un mes, la pesadez de saber que mi hermana no puede estar en momentos como los que acabo de pasar, me "joden". Literal, más sabiendo que ella sufre doble: 1. No puede estar aqui - 2. No puede estar conmigo.
Y, aunque la vida "joda" de vez en cuando, las cosas buenas llegan, y ya estamos en abril¡¡, a tan solo dos meses del verano¡¡. Y cuando Lorenzo llega, los buenos momentos se triplican. Ahora viene la Semana Santa y tenemos unos días de por medio para poder....¡¡Estudiar!!
Que maravillosa es la vida del estudiante, hay que irse a Groenlandia y volver para darse cuenta de que, en mi caso, ¡¡TERMINO AHORA LA CARRERA!!
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