Tengo un compañero en el trabajo, Laion, para ser mas exactos (ya hablé en alguna ocasión de él), que un día me confesó encantarle las Habas. Desde entonces tengo una gran obsesión cuando le veo0, ¡¡Nado entre habas!!. Como si de un sueño se tratase. Un sueño un tanto cómico, como quien cuanta ovejas, pues yo comienzo con las habas y no paro: Una haba, dos habas, tres habas, cuatro habas, cinco habas, seis habas, siete habas, ocho habas, nueve habas, diez habas, once habas, doce habas, trece habas, catorce habas, quince habas, dieciseis habas, diecisiete habas, dieciocho habas ....
Habas para desayunar, almorzar, comer, merendar o cenar. ¿Que opinas?
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