Nuestras reuniones ahora no son tantas como las que teniamos cuando estabamos en la facultad, pero son tantas las cosas que hay que contar que nunca da tiempo a decirse todo lo que hay que decirse y es que, tras la cena de navidad, todos hemos vuelto a nustra rutina, la gente sigue en el trabajo, unos han echo sus viajes, otros no salen, otros siguen estudiando (como la menda), y quizás habra quien, haya tenido escusas estupendas para no poder venir...Pero ante todo y sobre todo, mis amigos están siempre ahí para lo bueno y para lo malo, en la salud y en la enfermedad....
TODOS LOS MOMENTOS QUE QUEREMOS, LOS DISFRUTAMOS
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