CONDUCTORAS AL PODER

Y por muy absurdo que pueda parece, los examenes han dado la vuelta a la esquina y la verdad que no me está yendo nada mal. La verdad que he tenido mucha suerte y me lo he currado. Aún así, los días pasan y no he dejado de venir al trabajo, sigo haciendo las mismas cosas y el tiempo parece que no pasa en vano. Eso es muy bueno. Quizás me plantee estudiar orta carrera mas, jaja, decisiónes de un noche infierno madrileño. De momento, creo que quiero pasar los únicos tres examenes que tengo y luego, que el curso de mi vida decida lo que es mejor para mi conociemiento.

Aparte de mis examenes, debo felicitar a mi queridísima hermana Sara, que está aprobando todo lo que se le pone por delante¡¡..Porque ella lo vale.

Y ya que me pongo, voy a contaros una historia/chiste que me han contado:

Un hombre, en plan buenecito, le está friendo unos huevos para el desayuno a su mujer. De pronto, la mujer entra en la cocina y a grito pelao le dice :

¡Cuidado CUIDADO!, ¡Ponle un poco más de aceite!, ¡POR DIOS!, Estás cocinando demasiados al mismo tiempo ¡DEMASIADOS!. Dale la vuelta, Dales la vuelta, ¡AHORA!. Necesitamos más aceite. ¡POR DIOS!, ¿Dónde vamos a conseguir más aceite?¡ Se van a pegar ¡Cuidado, CUIDADO!, ¡Dije CUIDADO!, ¡Nunca me haces caso cuando cocinas! Nunca ¡CUIDADO!, Dales la vuelta, ¡Por favor!, ¡TRATA DE DARLES LA VUELTA!, ¿Estás LOCOOOO?, ¡Usa la CABEZA!, Échales sal. Sabes que siempre te olvidas de la sal. La sal. La sal. ¡¡¡¡USA LA SAL¡¡¡¡, POR DIOS ¡¡¡LA SAAAL!!!.

El marido la mira con asombro: - ¿Qué coño te pasa? ¿Crees que no puedo freír un par de huevos?

La mujer responde tan tranquila: - Así te enteras de lo que es conducir contigo...